Aprendes a trabajar con tu cuerpoA través de estiramientos, control de la respiración, concentración y automasaje, el do-in consigue desbloquear los meridianos corporales. En su base confluyen el yoga, el shiatsu y la medicina tradicional china.
Postura, respiración y concentraciónLas sesiones de do-in constan de tres fases. En la primera se realizan una serie de movimientos suaves que ayudan a tomar conciencia del propio cuerpo, a encontrar el equilibrio y a adoptar la posición correcta. Lograr una postura corporal adecuada es muy importante, ya que esto es lo que nos permite empezar a respirar correctamente y conseguir un buen nivel de concentración. Unir estos tres pilares es lo que más cuesta cuando se comienza a practicar el do-in, después se hace de forma inconsciente.
Aunque se basa en la realización de estiramientos, éstos no tienen nada que ver con los que se hacen en la gimnasia occidental o con las clases de stretching que hay en los gimnasio. Los movimientos, ejercicios y posturas del do-in buscan restablecer la armonía de cuerpo y mente, lo que proporciona una intensa relajación.
La segunda fase va precedida de una serie de movimientos para calentar todas las articulaciones. Una vez hecho esto comienzan los estiramientos de los catorce canales energéticos. Cada postura se realiza en armonía con la respiración, pero nunca se fuerza demasiado el cuerpo. Esta fase termina con unos minutos de relajación.
La última fase consiste en una sesión de automasaje a base de presiones y golpecitos suaves con los nudillos en los puntos de acupuntura o canales energéticos.
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